La crisis crediticia del sector de oficinas se está intensificando. Según un criterio, la situación es peor ahora que durante la crisis financiera mundial de 2008-2009. Del informe: Según Moody’s Analytics, solo una de cada tres hipotecas de oficinas titulizadas con vencimiento durante los primeros nueve meses de 2023 había sido reembolsada a finales de septiembre. Se trata del porcentaje más bajo para los primeros nueve meses de cualquier año desde al menos 2008 y muy por debajo del mínimo alcanzado en 2009, cuando se reembolsó el 47% de estos préstamos. Esa proporción también está muy por debajo de la tasa anterior a la pandemia, cuando más de ocho de cada 10 hipotecas de oficinas titulizadas que vencían se liquidaron en algunos años.
Si bien las cifras cubren sólo hipotecas de oficinas empaquetadas en bonos (los llamados valores respaldados por hipotecas comerciales), reflejan una congelación más amplia en el mercado de préstamos para construcciones comerciales. Muchos propietarios de oficinas no pueden pagar sus antiguos préstamos porque no pueden conseguir nuevas hipotecas. El teletrabajo y el aumento de las vacantes laborales han afectado las ganancias en la industria de la construcción, dificultando el pago de intereses. Las tasas de interés más altas han aumentado los costos de la deuda y reducido el valor de la construcción. Esa combinación está impulsando un aumento de los pasivos pendientes. La proporción de préstamos CMBS para oficinas que están en mora se ha triplicado el año pasado hasta el 5,75%, según Trepp. No ayuda que muchos bancos ya no concedan nuevos préstamos comerciales y que muchas compañías de seguros y fondos de deuda se hayan vuelto más cautelosos.